Es un buen aliciente, si hace girar un protector de pantalla así a la entrada del burdel, no faltarán clientes. De hecho, la dama no se complace realmente, sino que sólo demuestra su cuerpo y su temperamento. Por cierto, el cuerpo es sólo un cuatro, ¡pero las tetas son estupendas!
Se nota que esta hija es muy dañina. Su padre, una vez más, no está contento con ella, así que decidió castigarla. El proceso de castigo terminó con un hermoso acto de llenar el coño de su hija con el esperma del hombre.